En Boston, un grupo de alguaciles y un senador federal indicaron que el rechazo del gobernador Deval Patrick a un programa federal de seguridad migratoria retrasaría a Massachusetts en la identificación de inmigrantes ilegales en Estados Unidos que son detenidos por delinquir. Ante estos comentarios, las autoridades federales de inmigración expusieron que el programa Comunidades Seguras sería difundido a nivel nacional a través de un calendario independiente al apoyo que pueda recibir o no de otras autoridades o estados de forma individual.
Los críticos de la postura de Patrick han señalado diferentes delitos cometidos en los últimos meses, supuestamente, por inmigrantes que ingresaron sin permiso a los Estados Unidos. Además, cada vez son más las personas que aseguran que dichos delitos no hubieran ocurrido si estuviera vigente el programa de Comunidades Seguras.
Por otro lado, tres policías de Massachusetts y sus abogados dieron el miércoles una conferencia de prensa en un salón del congreso estatal para anunciar que desean aplicar de inmediato algunas partes del programa federal en sus condados. Sin embargo, dicho acto fue interrumpido por un grupo de defensores de los derechos de los inmigrantes que irrumpieron en el salón con la intención de dialogar con los alguaciles. Los tres alguaciles pertenecen a los condados de Bristol, Worcester y Plymouth.
El programa Comunidades Seguras fue desarrollado para verificar la situación migratoria de las personas arrestadas por delitos. Los opositores alegan que el plan propiciaría la discriminación racial y el aumento de la tensión entre la policía y las comunidades de inmigrantes.
El senador republicano Scott Brown le envió una carta a la secretaria federal de Seguridad Nacional, Janet Napolitano, solicitándole que el programa Comunidades Seguras se lleve a cabo de forma rápida y libre en Massachusetts.