Las personas que hayan entrado a Estados Unidos ilegalmente y se casen con un ciudadano americano, no pueden obtener su residencia permanente mientras que se encuentren dentro de los Estados Unidos. Esto aplica a toda persona que haya entrado por la frontera sin una visa valida,aunque la persona se haya casado con un ciudadano americano, tenga hijos que sean ciudadanos americanos, o haya recibido aprobación de una Certificación Laboral.
Por esta razón para que un inmigrante ilegal se legalice por matrimonio existen solo 2 opciones:
1) Que regrese a su país de origen para solicitar desde allí la residencia:
La mejor alternativa que existe para poder obtener la residencia permanente por matrimonio con un ciudadano americano es el proceso consular. El proceso requiere que el esposo ciudadano pida al inmigrante desde los Estados Unidos. El inmigrante entonces tiene que asistir una entrevista en su país natal.
Además de la petición de su esposo, el inmigrante necesita un perdón del Departamento del Estado de los Estados Unidos por el periodo de tiempo durante el cual estuvo en el país ilegalmente. Los tres motivos que el Departamento del Estado revisa para su decisión son: La razón por cual el inmigrante desea regresar a los Estados Unidos, El tiempo de estadía ilegal en el país del ilegal, y Si existe algún historial criminal.
2) Que se le abra un proceso de Deportación en el cual un juez de Inmigración escuche su caso y tal vez sea flexible.
La única manera en que dicha audiencia se puede dar es si la persona es citada porque se le abrió un proceso de Deportación. La persona expone su caso ante un Juez de Inmigración y si la persona tiene argumentos muy contundentes para estar en Estados Unidos (como por ejemplo persecución en su país) o si es casada con un ciudadano americano, es posible que el Juez sea flexible y permita el ajuste de estatus aunque se encuentre en los Estados Unidos.